Huitzilopochtli es el dios “patrón“ de los mexihcah. Siendo común que los mismo dioses mesoamericanos eran adorados en muchos pueblos, resulta interesante observar que Huitzilopochtli sólo era adorado en Mexihco. Los otros pueblos veían a Huitzilopochtli con temor, le adjudicaban enteramente el éxito de su pueblo. Y no es para menos: según las leyendas, fue él quien guió a los aztecas hasta su nuevo hogar, Tenochtitlan. Fue él quien les dijo exactamente lo que debían hacer para primeramente sobrevivir y luego dominar todo el valle de México. Y finalmente, también es él quien les ayudaba a ganar las guerras. Su nombre alternativo es Mexihtli. Existen teorías que apuntan a que Mexihtli fue un caudillo y líder de los aztecas, tan valeroso y épico que al pasar de los años tras su muerte, se convirtió en un mito, en un dios. Haya sido un dios o un guerrero, Huitzilopochtli influyó notablemente en la historia.
1.- Cuando los aztecas vivían en Aztlan, eran una humilde tribu de pescadores que le debían dar tributo a los jefes de la región. Finalmente Huitzilopochtli (o Mexihtli) les dijo que debían irse de allí para buscar su propia tierra donde ellos mandarían. El códice Boturini narra todo el viaje emprendido desde Aztlan-Chicomoztoc hasta Mexihco-Tenochtitlan.
2.- Una vez se asentaron en la zona del Valle de México, los ahora llamados mexihcah no tenían tierras propias. Estaban allí por mera conmiseración de los tecpanecah de Azcapotzalco. Su alimentación se basó en serpientes, lagartijas, y diversas plantas del lago. Allí los mexihcah hubieran prosperado rápido de no ser por los tributos que debían entregar, los cuales frenaron su crecimiento económico. Se sabe que los tributos llegaron a ser extremos. Pero los mexihcah no estaban listos para la guerra, y su dios se los hizo ver. Huitzilopochtli les decía: “Aguanten, cumplan con los tributos que les piden, yo los ayudaré; verán que pronto estos (los tecpanecah) van a pagar con su sangre“. Esa paciencia dada por su dios, les permitió desarrollarse mejor y finalmente, en 1428, los mexihcah se apoderan del valle al conquistar y esclavizar por completo a los tecpanecas.
3.- Mitológicamente hablando, el aspecto más importante de Huitzilopochtli es que según los mexihcah, él es el sol. En la leyenda del nacimiento de Huitzilopochtli (que pueden leer aquí: http://www.inah.gob.mx/boletines/8-investigaciones-y-estudios-historicos/495-el-mito-del-nacimiento-de-huitzilopochtli), si leen con atención, se podrán dar cuenta de que Huitzilopochtli es como el sol, su hermana Coyolxauhqui es la luna y los surianos son las estrellas. El nacimiento de Huitzilopochtli significa, metafóricamente, la dualidad día-noche. Todos los días vemos como Huitzilopochtli está en el cielo, al atardecer pierde un poco fuerza y se va a Mictlan. En la noche, aparecen en escena los surianos y Coyolxauhqui, quienes buscan acabar con su hermano. Pero luego al día siguiente vuelve a salir Huitzilopochtli, y “mata“ a la luna y las estrellas, las desaparece, para seguir con su camino. Para los mexihcah, la lucha entre el sol y la luna, entre la luz y la oscuridad, es un asunto de vida o muerte. Sin el sol, no hay vida. Por eso los mexihcah se hicieron llamar “el pueblo del sol“. Su misión era darle sacrificios al sol para que volviera a salir al día siguiente. Ellos en verdad creían que si Huitzilopochtli no recibía alimento, no saldría para iluminar el mundo y por ende sería el fin de todo. Huitzilopochtli fue el dios que sirvió como base a la ideología mexihcatl de que ellos debían dominar el cemanahuac (el mundo).
Como último comentario para reforzar la influencia de este dios en la historia de México: Huitzilopochtli aparece en el escudo de nuestra bandera (es el águila), además de que el nombre de nuestra nación se basa en su nombre alternativo (como comercial, léase la nota: significado real de México).
-Otomitl Achcauhtli-
Muy interesante
ResponderEliminar